Paranóicos.

lunes, 1 de julio de 2013

En tiempo de sequía , los lagos se volvieron exhibicionistas.

Estabas enamorado de mi palidez independiente de estaciones,
enamorado de la carencia de precipicios longevos,
Estás. No estoy.

Estás arrepentido del cambio del blues al jazz.
Soy consciente de tu error pues el blues no nos sentaba bien.
En verano los parques se helaban de frío, en diciembre las calderas fueron puestas en marcha.

Los relojes que no controlamos se rompieron en calles que jamas experimentamos como uno.
Las canciones que nos representaban ahogaron en el sentimiento en aquel Támesis donde yo me arrojé por impotencia a tu armonía. La piedra posee historias jamás escritas.

La piedra tampoco depende de estaciones para mantenerse estable.